Soy una profesora de primaria. Hace unos años me jubilé y decidí traer un poco del mundo a mi hogar. ¿Y qué mejor oportunidad que un bed and breakfast en Soliera para hacer nuevos amigos?
Todo comenzó como un juego en 2011, entre charlas con mis amigas que me animaron a abrir esta estructura en mi casa de origen.
El nombre del b&b, "La Corte delle Civette", no fue elegido al azar; hay búhos que anidan en un nogal y, recordemos a todos, esta rapaz era la favorita de la diosa Atenea, portadora de buenos augurios.
Esta antigua casa de campo es el lugar de mi infancia y aún guarda mis preciosos recuerdos.
Aquí, las cuatro estaciones se suceden con su encanto cautivador. La llegada de las golondrinas y el canto de los pájaros anuncian la primavera, sin necesidad de consultar el calendario.
Este es un lugar tranquilo, donde vivo junto a Maya, mi dulce perrita, y a Tigro y Nerina, mis dos gatos que ronronean al mínimo gesto de caricia.